MANTENER RESTRICCIONES, FORTALECER LA SOLIDARIDAD.

MANTENER LAS RESTRICCIONES Y FORTALECER LA SOLIDARIDAD   

Ante la creciente flexibilización de las restricciones contra la propagación de la covid 19 que vienen poniendo en marcha todos los gobiernos, así como el evidente clima de distención social que se viene apreciando desde hace varias semanas entre la población, desde las Secciones sindicales de Autonomía Obrera y CGT del hospital Puerta del Mar queremos manifestar públicamente lo que sigue:  

Primero. Que el importante descenso que se constata de los principales indicadores utilizados habitualmente para medir la situación de la pandemia (tasa de incidencia, ocupación hospitalaria, etc.) no obedece ni a la imprescindible campaña de vacunación ya iniciada (que apenas alcanza aún al 5% de la población), ni mucho menos, como es obvio, a la falsa apariencia de desaparición del virus del ámbito comunitario, sino precisamente A TODO ESE CONJUNTO DE MEDIDAS DE RESTRICCIÓN DE CONTACTOS que con tanto esfuerzo todas/os hemos venido priorizando durante estos meses atrás.  

Segundo. Que, consecuentemente con ello (y como ya quedó sobradamente acreditado tras las primera y segunda ola de la pandemia), si ahora se vuelven a flexibilizar las restricciones y, sobre todo, si de nuevo la población vuelve a aumentar los contactos sociales sin respetar las mínimas medidas de seguridad frente a las transmisiones (obligatoriedad de las mascarillas y distancia social, fundamentalmente), las cifras de contagios volverán a subir inevitablemente y de forma exponencial en muy pocas semanas o días.   

Tercero. Que, sabiendo todo lo anterior y, lo que aún es más grave, disponiendo ya de la experiencia sufrida tras desescaladas anteriores, consideramos un absoluto despropósito y una irresponsabilidad que nuestros cargos públicos vuelvan a reproducir dinámicas de ficticio “retorno a la normalidad”, que sólo pueden conducirnos a otra nueva fase aguda de contagios, incremento de los ingresos hospitalarios, saturación de las unidades de intensivos, fallecimientos y secuelas gravísimas para miles de ciudadanos/as.  

Cuarto. Que, además de ello, toda la población tiene la urgente obligación moral de tomar plena conciencia de que el sistema sanitario de nuestro país (en lo relativo a su capacidad de atención general) lleva ya un año funcionando bajo mínimos, como consecuencia tanto de la necesidad de atender a las miles de víctimas directas de la covid 19, como de la incapacidad de los gobiernos para incrementar los recursos, lo que ha dado lugar a la segunda gran pandemia en materia de salud que hoy día sufrimos: la de los miles y miles de pacientes de otras patologías que se quedan sin diagnosticar, ni tratar y que llegan, incluso, a morir por no haber recibido a tiempo la atención sanitaria que precisaban.      

Partiendo de la base de que los gobiernos no van a aumentar de forma inmediata los recursos para atender simultáneamente a todo tipo de pacientes, la única posibilidad que el sistema sanitario tiene a corto plazo de poder empezar a corregir esos crueles retrasos es que los hospitales no se nos vuelvan a saturar de pacientes covid, lo que  

únicamente podrá garantizarse, a su vez, manteniendo niveles ínfimos de transmisión del virus. Si en pocas jornadas, empujados por la reducción de las restricciones, la imagen social de seguridad que ello genera y la llegada del buen tiempo, todos/as relajamos las medidas de autocontrol y volvemos a relacionarnos socialmente sin protección, los niveles de transmisión del virus volverán a subir y con ello los ingresos hospitalarios, volviendo a hacer imposible la asistencia de tantos miles y miles de pacientes no covid que se encuentran pendientes de estudiar y tratar.       

Quinto. Por todo lo expuesto, desde las secciones sindicales de Autonomía Obrera y CGT del hospital Puerta del Mar reclamamos públicamente lo que sigue:  

A los gobiernos, les exigimos 

1. Que se sigan manteniendo todas, absolutamente todas las medidas de restricción frente a la covid 19 que han estado en vigor estos meses atrás y que son las únicas que pueden garantizar un nivel bajo de transmisión del virus.   

2. Que se aproveche esta nueva fase de baja incidencia para reforzar de una vez la atención primaria, incrementando su capacidad de rastreo y de realización de pruebas PCR (recurriendo, por ejemplo, al personal que en estos momentos no se precisa en los hospitales), ya que solo así estaremos en condiciones reales de contener desde el primer momento cualquier nueva tendencia al alza de los contagios que pueda producirse en próximas semanas. 

3. Y que se acelere al máximo las campañas de administración de vacunas, que en la actualidad, y en el caso de Andalucía, apenas han logrado inmunizar, como ya hemos apuntado al principio,  a un 5% de la población.    

Por su parte, a toda la población le pedimos, le rogamos: 

1. Que sigan limitando, en todo lo posible, las actividades sociales (la mayoría de los contagios se producen en reuniones familiares y de amigos) y que mantengan siempre todas las medidas de seguridad ya conocidas (mascarillas, distancia de seguridad, etc.), sin relajar su temor ni un solo instante.    

2. Que todos aquellos sectores sociales afectados por las medidas de restricción que la crisis impone no dejen de movilizarse y luchar por aquellas políticas de compensación y de redistribución de la riqueza que todos los gobiernos deben priorizar en estos momentos a fin de paliar e, incluso, eliminar el extremo incremento de la pobreza y los brutales dramas sociales que se están viviendo.  

Frente a aquellas políticas que priorizan el mercado y el individualismo como ejes básicos del funcionamiento colectivo, hoy más que nunca los principios de solidaridad y justicia social tienen que pasar a convertirse en absolutos principios de obligado cumplimiento para todos los gobiernos y administraciones.  

Si las restricciones y la vacunación son imprescindibles para superar la pandemia sanitaria, la solidaridad y el reparto equitativo de la riqueza son trascendentales para poder vencer la pandemia social, menos mortal, pero mucho más cruel y grave, sin duda, que la primera.      

Cádiz, a diecinueve de marzo de dos mil veintiuno. 

SECCIONES SINDICALES DE AUTONOMIA OBRERA Y CGT DEL HOSPITAL PUERTA DEL MAR 

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