Un acuerdo que refleja en su totalidad la reivindicación laboral desde el inicio del conflicto.
Acuerdo de presente, futuro y un referente, con una valoración económica generalizada y unas condiciones laborales con reducciones de jornada sin afectar a los salarios y aumento de jornada para completar al personal de jornadas parciales.
Unas funciones muy específicas y personalizadas, provocada por las necesidades del servicio. Atienden y cuidan a personas con necesidades, mayoritariamente mujeres y que siempre ESTÁN, para todo y con salarios miserables.
El próximo objetivo es la municipalización del servicio, posible, necesario y viable, pero tarea no sólo de este colectivo de trabajadoras, todas las fuerzas vivas de la ciudad deben defender y abanderar.
Nuestra enhorabuena a un colectivo el cual durante este conflicto me inculcó su problemática. Que verdad es, que los problemas deben verse y valorar desde dentro.
Se lo merecen todo.